Deportes
Prevención
Cuando sufrimos una contractura, el músculo nos está dando el último aviso de que algo no está bien ¡Seguí leyendo!
El primer paso en la prevención, es la adopción de buenas posturas, ya que la mayoría de las contracturas se deben a malos hábitos mantenidos en el tiempo. Entonces se puede consignar, que si quienes la provocan son las mismas personas, hay posibilidades de evitarlas.
Aquellas personas que permanecen sentadas o paradas mucho tiempo, de entre 8 a más horas por trabajo, se les recomienda realizar estiramientos cada hora, para prevenir sobre todo las zonas del cuerpo que más están en uso.
En cuanto a la práctica deportiva, se hace menester realizar un adecuado calentamiento y una completa vuelta a la calma, tras el esfuerzo físico. Dando así, estiramiento y reposo a los músculos empleados.
El mejor tratamiento es justamente la prevención y por eso su importancia, pero en caso de ya generado el dolor, quiere decir que se falló en ese objetivo y habrá que volcarse a un proceso para sanar.
En el mayor de los casos no son dolores limitantes para la movilidad, sin embargo es fundamental prestarles atención para evitar que se convierta en una lesión de peor envergadura. Lo mejor para tratar una contractura es la aplicación de calor seco moderado en tiempos breves (15 minutos) a lo largo del día, acompañados de estiramientos lentos, suaves y controlados.
Publicada: Martes 1 de diciembre de 2020
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