Sumarle mayor vertiginosidad al entrenamiento puede venir de la mano de incrementar la velocidad ¡Mirá!
Hay veces que se necesita una rutina bien activa o también es posible que se quiera potenciar un factor importante de las virtudes físicas, como lo es la velocidad. Para eso, te traemos algunas recomendaciones de ejercicios que te pueden ayudar a formar una rutina enfocada en ese objetivo.
Para comenzar, hay que marcar que entrenar velocidad no quiere decir necesariamente correr rápido. Claro que ese puede ser uno de los ejercicios, pero no el único. De hecho, se puede comenzar trotando a un ritmo sostenido, durante un determinado tiempo, entre 10 o 15 minutos.
Luego de esa primera parte de trote sostenido, se puede optar por incrementar la velocidad y medirla en zancadas o en periodos cortos de tiempo, que no superen los 15 o 20 segundos. Esos intervalos de freno y arranque, serán claves para potenciar la respuesta y la aceleración.
La rutina se puede complementar con subidas y bajadas en escaleras, saltos con soga y hasta sentadillas. También puedes agregar peso a tus tobillos en el trote o generar de alguna manera una carga de peso adicional.
Publicada: Miércoles 7 de julio de 2021