Suele decirse que un equipo que se conoce juega mejor, por eso nos acercamos a dos de los jugadores del plantel de fútbol para que nos cuenten cómo va la relación dentro del campo y algunas jugadas del laboratorio futbolístico de la UP, a medida que avanzan los entrenamientos.
Lautaro Cabrera, que con 20 años se desempeña como delantero y se encuentra estudiando la carrera de contador público, nos abre las puertas del entrenamiento junto a Julián Castro, de 23 años, volante central del equipo y estudiante de Periodismo Deportivo. Los dos marcan como algo fundamental la buena relación que tienen, que ya se convirtió en amistad, sobre todo porque son posiciones que se conectan constantemente en la cancha y deben tenerse confianza el uno con el otro.
Respecto a la rotación del equipo, mencionan "Es algo que está por cuestiones normales del día a día”. Julián aclara igualmente que el entrenamiento es muy parejo y si se mantienen enfocados, con entusiasmo, las ausencias que se generen por expulsiones o alguna lesión pueden llegar a no notarse. “Todo el que entra está preparado para jugar” remarca Lautaro.
Ambos reconocen que se trabaja en jugadas preparadas y movimientos generados durante la semana en los entrenamientos. Mucha definición para los delanteros dice Lautaro y Julián complementa con otros como: rombo, transiciones de defensa-ataque, el uno dos y hasta ahí, porque hay secretos que no se pueden revelar claro.
Si bien en un primer momento era el entrenador quien proponía los gestos para entenderse dentro del campo, ya con el correr del tiempo y la relación construida, los jugadores reconocen que se entienden de buena manera con gestos y movimientos ya propios. El 5 y el 9 del equipo dejan una linda postal de la conexión del fútbol en la Universidad de Palermo.
Publicada: Jueves 15 de agosto de 2019