Antes de incurrir en una lesión, el cuerpo puede dar señales de lo que viene ¡Leé algunas!
Cuando se entrena en alto rendimiento o de forma asidua, uno conoce su cuerpo de mejor manera y puede advertir el momento que debe exigirse más o menos. Sin embargo, quienes comienzan algún ejercicio o retoman entrenamiento tras un parate de inactividad, pueden ser víctimas de la ansiedad y de no escuchar o prestar atención a las señales que envía el físico.
Lo principal y algo que parece básico, pero muchas veces se tapa, es el dolor. Sencillamente una molestia, ya es signo suficiente de que algo no anda bien. No quiere decir que ya esté lesionado un músculo, articulación o tendón, pero sí que es necesario al menos frenar con lo que se está haciendo.
Si al frenar, el dolor disminuye y se aplaca, es probable que solo haya sido una sobrecarga del momento y no haya pasado a mayores. En cambio si luego de frenar, el dolor persiste y hasta se agudiza, si será necesario consultar a un profesional porque puede ser que haya una lesión que atender.
De todas maneras, en el caso de los que vuelven a entrenar después de mucho tiempo o comienzan una actividad nueva, si es muy común que sientan dolores en los momentos y hasta días posteriores, pero tales molestias refieren a un acondicionamiento que realiza el cuerpo tras estar inactivo.
¡Escuchá a tu cuerpo, sabe cómo cuidarse!
Publicada: Jueves 21 de enero de 2021