Derivado de nuestro último Seudoblog, nos preguntamos por qué esta famosa obra de Shakespeare tiene tan mala reputación. ¿Sabías que incluso hasta decir su nombre está mal visto y puede traerte mucha mala suerte? Si sos supersticioso, no te pierdas los por qué.
Las leyendas con respecto a Macbeth son innumerables: para empezar, se dice que en la primera función el mismo Shakespeare tuvo que hacer el papel principal porque el actor se enfermó y murió. Y luego de esto, otra cantidad de sucesos de índole similar cada vez que se volvía a interpretar llegan hasta la actualidad: violentas tormentas, peleas a muerte, teatros incendiados, actores fallecidos en medio del escenario, entre otras.
Como todo mito, tiene más de una explicación:
La primera de ellas es más bien sobrenatural y tiene que ver con un canto que forma parte de la obra, en la cual unas brujas invocan a espíritus malignos. Dicen que dicho ritual supuestamente funcionaría y que las almas en pena aparecen en cada función, dispuestas a arruinar todo.
La otra explicación, más realista, dice que en épocas contemporáneas al autor las compañías que hacia el final de la temporada no hubiesen tenido éxito debían recuperarse interpretando una obra popular que era justamente (en la mayoría de los casos) Macbeth. Por lo que esta obra era vista por los intérpretes como la última oportunidad: si fallaban serían despedidos. Y por ello siglos después los actores continúan mirándola de reojo.
Y vos, ¿con qué explicación te quedás?