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Desde hace algunos años Nicolás Cabrera (Fac. Diseño y Comunicación) colecciona y cuida distintas especies de cactus en el patio de su casa. Por esto, nos aconseja por qué es una planta bella y práctica para tener en casa, y brinda algunas recomendaciones para saber cómo mantenerlas correctamente.

"Mi afición comenzó al recibir un pequeño cactus de regalo. Al buscar información de cómo cuidarlo, me enteré de la cantidad de formas que existen y que también florecen. Actualmente tengo más de cien ejemplares de unas ochenta especies que fui comprando, me han ido regalando o traigo de viveros de otras provincias en las que estuve y que no se consiguen en Capital".

A la hora de decorar su casa y principalmente su patio, Nicolás elige sin dudas los cactus porque "tienen el tamaño perfecto para ocupar cualquier repisa, para decorar cualquier escritorio de oficina, o adornar la mesa ratona de un departamento en Capital. Además son un excelente regalo".

De todas formas, aclara que esa idea de que este tipo de plantas no necesitan ser regadas es un mito: "la realidad es que por la creencia de que no necesitan ningún cuidado, cientos de cactus pasan sus últimos días en nuestras casas, departamentos y oficinas. El riego siempre debe ser en el momento que el sustrato está completamente seco, una vez por mes en invierno y una vez por semana en verano es lo aconsejable. No toleran bien el encharcamiento por lo que si el sustrato tiene arena o piedritas que ayuden a drenar sería ideal. Si nos vamos de vacaciones no necesitamos preocuparnos porque resisten mejor la sequía que el exceso de agua".

Además, Nicolás aclara que para su correcto cuidado y crecimiento, hay que tener algunas cuestiones en cuenta: "en cuanto a la ubicación existen variedades que necesitan sol directo y otras que prefieren la sombra, por lo que lo ideal sería averiguar a qué especie pertenece nuestro ejemplar. Los pequeños que venden en los viveros sólo toleran algunas horas de sol pero cuando están correctamente cuidados, los cactus florecen ya que las condiciones son óptimas para su reproducción. Por último, hay que tener en cuenta que algunas especies tardan años para su primera floración, otras florecen sólo de noche o duran unas pocas horas pero en ese momento confirmamos que hicimos todo bien y que ya es capaz de dar nueva vida".