Si de reinventarse y sobrevivir se trata, Patricia Charo (Fac. Diseño y Comunicación) sostiene que el tejido lo ha logrado. En esta edición del Seudoblog nos detalla algunas de las modificaciones que ha sufrido el tejer en el transcurso de los últimos años.
Muchos diseñadores de moda y grandes empresas exponen sus creaciones en desfiles y locales, con gran sorpresa varios artículos son tejidos a mano. Ese valor agregado es único, como cada punto a tejer que es único también.
Después de los años de la guerra, el dinero y la gente apenas comenzaban a recuperarse de las terribles pérdidas que se habían sufrido. El tejido de punto recibió un gran impulso gracias a la producción de colores y diferentes tipos de hilo. Gran variedad de patrones y ediciones de revistas dieron al mercado muchos diseños en colores brillantes. Las niñas aprendieron a tejer en las escuelas, ya que era una habilidad bastante útil, no sólo un hobby.
Muchas revistas en muchos países diferentes incluyeron patrones no sólo de ropa, sino también de mantas, juguetes, bolsos, cortinas y otros artículos. Habilidosas manos elaboraron artículos para vender con un beneficio. Pero en los `80 la popularidad del tejido sufrió una fuerte disminución. Las ventas de patrones e hilo casi colapsaron, ya que tejer parecía pasado de moda. A los niños rara vez se les enseña en las escuelas.
Entonces, la disponibilidad y el bajo costo de los artículos tejidos a máquina se consideran más prácticos y más baratos que comprar las herramientas y fabricarlas usted mismo. Como resultado de esto, los géneros de punto se asociaron con la casualidad inteligente más que con el deporte/ocio como lo había sido anteriormente. Los avances en la tecnología vieron versiones computarizadas de máquinas de tricotar y algunos artístas comenzaron a ver el potencial del tejido de punto en lugar de una artesanía o industria. Como resultado, se prestó más atención al aspecto del diseño del tejido de punto, que a los usos de los medios de moda.
Ya entrados al año 2000 el resurgimiento se debe en parte al crecimiento de Internet y las tecnologías basadas en Internet, la “revolución hecha a mano” y el creciente interés en la artesanía de bricolaje. Las fibras naturales, provenientes de animales como alpaca, merino y mohair, y fibras vegetales como el algodón, se han vuelto más fáciles y baratas de obtener y procesar. Esto, a su vez hace que las fibras naturales para tejer estén ampliamente disponibles. Otras fibras, como el bambú, la seda y la llama también están ganando popularidad.
En la actualidad, la industria del hilo ha estado fabricando recientemente nuevos tipos de "hilados de novedad", utilizando una combinación de fibras naturales y sintéticas. Estos hilos son bastante especiales porque los resultados finales son deslumbrantes, años de experiencia no necesarios. Los diseños tradicionales combinados con diseños no tradicionales están sucediendo más que nunca ahora.
El Tejer está cambiando, agregando, reinventado y mezclando todo el tiempo. Lo que hoy conocemos como tejer será algo totalmente diferente. Sin embargo, el tejido ha sobrevivido al paso del tiempo y continuará haciéndolo.