"El concepto general surge a partir del análisis de las situaciones de uso", dice Charly Moore acerca de su modelo de ojotas Racer. "Además de su uso como calzado, al proyectarse para chicos de cinco o seis años, también puede ser utilizada como juguete. Entonces este concepto rompe con la morfología, debido a que su apariencia debía remitir a una lancha o bote para que el niño lo relacione con un juguete con el que le gustaría divertirse utilizándolo en la pileta o la bañera, pero que a su vez no pierda las características tanto visuales como funcionales del calzado."
Producidas a partir de una estructura principal de inyección de plástico de color naranja, con una co-inyección de color negro del mismo material, la tecnología que utilizan las ojotas permite generar formas variadas y con distintas propuestas de combinaciones de color. En cuanto al carácter de juego, la parte trasera incorpora un espacio para que el chico pueda escribir su nombre y así identificar sus ojotas, tanto él como sus padres. Y como agrega Charly, "esto se realiza en barcos reales a los que generalmente se les otorga un nombre identificatorio, ya sea por algo sentimental como por requisitos legales." Las formas de una lancha, para Charly Moore remite a la infancia, a sus amigos y sus días de pileta, que hoy hace extensivo a su sobrino.
Charly Moore anhela desarrollar soluciones y emprendimientos innovadores junto a equipos de trabajo. "Y me interesa mucho lo que es el diseño conceptual, imaginarme cuales van a ser los objetos del futuro y como se verían." Según cree, el diseño industrial está fuertemente relacionado con las tecnologías y es vital, "conocer, investigar y explorar constantemente, porque son las tecnologías las que van a ir actualizando los antiguos métodos ya sea de fabricación, de diseño o de proyectos."
Charly Moore