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El currículum vitae es una herramienta de marketing que sirve para captar la atención de los selectores. Consta de información relevante sobre el candidato que se presenta de manera resumida. Su finalidad es conseguir una entrevista laboral que permita explicar más a fondo y con detalle, lo que figura en él. 

El currículum debe ser claro, poseer una estructura definida, presentar la información de manera ordenada y en apartados. Debe ser lo más corto y conciso posible, ya que los selectores generalmente los miran de manera rápida y buscan en él información puntual.

La mayoría de los currículums presentan los apartados en el siguiente orden: datos personales, formación universitaria, experiencia, conocimientos (idioma e informática), cursos o formación complementaria y objetivo laboral. Este último también puede ubicarse luego de los datos personales.

El currículum puede ser formal o informal, recomendándose el último solo para áreas relacionadas con el diseño, creatividad publicitaria y arte. Los currículums también poseen varios formatos: 

• Cronológico inverso: son los más comunes y utilizados para la búsqueda laboral. Tienen la ventaja de que los selectores están muy familiarizados con ellos. En los apartados “formación”, “experiencia” y “formación complementaria” se debe empezar con la información más reciente y finalizar con la más antigua.

• Funcional: En ellos se divide la información por temas. Es conveniente cuando se quiere acceder a un sector profesional totalmente diferente, para lo cual no es relevante la experiencia laboral anterior, o para personas que trabajan de modo freelance. Sirven para hacer hincapié en habilidades y capacidades de la persona.

• Mixto o combinado: la información se describe de manera cronológica inversa pero los apartados se basan en competencias y capacidades, o en empleos puntuales en empresas puntuales. Sirve para mostrar rápidamente al selector habilidades que pueden ser transferibles desde otras experiencias hacia el puesto solicitado.


Aspectos a tener en cuenta al armar un currículum vitae:

1-La información debe ubicarse de manera cronológica inversa, arrancando por la última experiencia, los últimos cursos y los estudios más recientes.

2-Los datos personales deben incluir: nombre completo, edad o fecha de nacimiento, nacionalidad, domicilio, teléfono (de línea y celular) y mail. Este último debe ser apropiado a la búsqueda de trabajo (preferentemente con nombre y apellido).

3-Es conveniente colocar una foto junto a los datos personales. Solo debe abarcar la cara de la persona.

4-En los estudios deben figurar las instituciones, las carreras estudiadas, el nivel de avance en cada carrera y las fechas de inicio/fin. Si el promedio es mayor de 7 se recomienda colocarlo.

5-Al redactar la experiencia se deben colocar las fechas de inicio/fin, el nombre de las organizaciones donde se trabajó, el nombre de los puestos y un resumen de las tareas realizadas.

6-En “otros conocimientos” se recomienda colocar el nivel de cada uno de ellos (avanzado/intermedio/básico).

7-La formación complementaria consiste en los cursos que aportan conocimientos relacionados con la búsqueda. También en este apartado se deben colocar las fechas y las instituciones donde se realizaron.

8-El objetivo laboral es un espacio donde el candidato puede explicar cuáles son sus deseos a la hora de conseguir un trabajo y qué está dispuesto a aportar a la organización.

9-El currículum no debe abarcar más de una carilla y media o dos, a menos que el postulante haya acumulado mucha experiencia relevante para el puesto a lo largo del tiempo.

10-Si bien generalmente se posee un único currículum para todas las búsquedas, se recomienda adaptarlo a cada aviso en particular. En especial el apartado “objetivo laboral”. Para eso es conveniente prestar atención a las competencias que pide el aviso y armar un texto que coincida.



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